DEFINICIÓN DE LA PERSONALIDAD
No existe una definición
comúnmente aceptada por todos los investigadores de este campo.
Aspectos en los que están de acuerdo para con la Psicología de
la Personalidad:
·
los estudios sobre personalidad desempeñaron un papel disidente
(en contra de la Psicología Experimental). Esto ha supuesto una
desconexión pero ha dado mayor libertad de movimiento y se han
ido haciendo estudios al margen de la Psicología General/normativa/científico-experimental.
·
Se caracteriza por un estilo funcional, de buscar aspectos
utilitarios que lo demuestra su vinculación con la práctica
clínica.
·
Junto a ese aspecto funcional se constata que la Psic. Pers. Se
caracteriza por dar importancia a procesos motivacionales:
procesos que tienen en cuenta los motivos que mueven al sujeto ,
procesos que han sido dados de lado
·
Amplitud de sus fines y carácter integrador, holista (globalización),
aspectos que han hecho que tuvieran que conjugarse muchos
aspectos, eso no conlleva el que se tenga que dejar de lado la
obligación de definir.
|
|
Hay una gran dificultad para
definir la Psicología de la Personalidad de manera útil, por
ello no existe. Uno de los primeros recursos con los que se
cuenta es la etimología que permite conocer el marco cultural e
ir captando las derivaciones posteriores.
Persona: expresión latina que
procede del griego. Diversidad lingüística que ha favorecido la
diversidad conceptual. En latín aparecen elementos mitológicos,
jurídicos y aspectos de orden social (mundo griego en teatro) En
griego tenemos tres términos:
·
pros/opsis: cerca de/mirada – apariencia
·
prosopo: máscara de actores en teatro griego
·
peri/soma: vestimenta. Alrededor/cuerpo
En latín nos encontramos con dos
expresiones:
·
phersu: figura parecido a un personaje de las primeras
representaciones teatrales
·
personare: cánula para hacer sonar la voz
A partir de estos conceptos se
fue extendiendo esta perfilación del concepto de personalidad.
La representación de la tragedia
era vivida como una liberación de los sentimientos, trataban de
que “nos” identificásemos con la tragedia/los sentimientos.
En el derecho romano antiguo la
persona era opuesta a la res (cosa).
La teoría siempre intentaba
explicar el misterio de la Trinidad.
Se pasa de la máscara (apariencia)
a la postasis (sustancia).
La pluralidad de expresión de
persona va disminuyendo y es Cicerón quien recoge cuatro
acepciones de persona:
·
falsa apariencia (ante los demás)
·
personaje/papel que se representa en el teatro
·
conjunto de cualidades que capacita al ser humano para un
trabajo/misión
·
dignidad/importancia/distinción
Por tanto hay dos campos
semánticos referentes a la persona: algo que tiene que ver con
las funciones que uno desempeña , algo exterior definido por las
funciones sociales del sujeto y por la imagen que los demás
tienen de ese sujeto y el segundo comp. remite persona a lo
interior, entidad específica y real de cada ser humano.
Actualmente el uso de
personalidad también tiene esa ambigüedad del pensamiento
clásico tanto a nivel popular como científicamente (psicológicamente).
En el empleo popular se emplean las connotaciones de papel
social y prestigio o dignidad, lo que explica la persistencia de
los estereotipos.
Ese conjunto de asignaciones
están también presentes en aquellas definiciones que a partir de
Allport (1937) van a ser llamadas biosociales o
psicosociales para la idea de que la personalidad está dada sólo
por las reacciones de los demás, no es lo más conveniente para
definir personalidad, deben preferirse las biofísicas
personalidad se enciente como característica del sujeto,
característica como entidad independiente vinculada con ciertas
cualidades que pueden ser medidas y descritas cualitativamente.
En este planteamiento sobre el significado biofísico se asoma
algo de cómo se amplió en el mundo latino el matiz jurídico
hacia un desarrollo más filosófico y teológico. En el
significado biofísico se trasluce un cierto sustancialismo
psicológico que va a dirigir su mirada hacia ala idea de que
habría una sustancia básica, lo que provoca muchos problemas
porque algunos piensan que la personalidad no depende de una
sustancia básica.
Al revisar la literatura
científica, en lugar de tener una definición definida, hay una
amplísima gama de definiciones, por ejemplo de Allport,
Murphy, Guilford, Rofter, Pervin y
Pinillos.
CATEGORÍAS DE DEFINICIÓN
Sistema sugerido por Allport,
tiene 5 tipos de definiciones:
·
Aditivas
(“sumar”): aquellas en las que se asimila la Psicología de la
Personalidad a la Psicología General y vienen a ser entendida la
personalidad como la suma de todas las características que
definen a un individuo, es decir, tanto las disposiciones
innatas como las adquiridas por aprendizaje.
·
Configuracionales/Integrativas:
hacen hincapié en el carácter organizado de las características
que definen a un individuo.
·
Jerárquicas:
acentúan el carácter estructural y de ordenamiento que confieren
a cada elemento un significado dentro de un marco.
·
De ajuste:
se refieren a la idea de que la personalidad es entendida como
el conjunto de los procesos de ajuste/adaptación al medio.
·
Distintividad:
se acentúa la diferenciación individual.
NOTAS:
a)
La personalidad
abarca toda la conducta (tanto la manifiesta como la privada)
b)
La personalidad hace
referencia a características que son relativamente consistentes
y duraderas (pero ¿qué es la más consistente y duradera?)
c)
El concepto de
personalidad resalta el carácter único de cada individuo (problema
con la unicidad)
d)
Carácter inferido de
la personalidad, es decir, la personalidad es algo que se
infiere a partir de la conducta, no tiene una existencia real
por sí misma
El término personalidad hace
referencia a la organización relativamente estable de aquellas
características estructurales y funcionales, innatas y
adquiridas que conforman el equipo peculiar y definitorio de la
conducta con que cada individuo afronta las diferentes
situaciones.
OBJETO DE ESTUDIO Y METODOLOGÍA
¿Se puede hablar dentro
de Psicología Científica de una rama orientada al estudio de la
Psicología que la Personalidad o está asumido por otras áreas?
Para ello hay que señalar/preguntarse si hay objetivos propios y
hay que establecer las fronteras con otras disciplinas.
Objetivo
de la Psicología de la Personalidad está constituido por el
estudio de la conducta normal en todos sus aspectos:
·
intento de describir a las personas de manera fiable y
útil
·
predecir
las diferencias individuales en las conductas de las personas
bajo condiciones semejantes
·
el psicólogo de la personalidad busca entender bajo qué
condiciones se adquieren y consolidar ciertos patrones de
conducta
·
la psicología de la personalidad intenta explicar cómo cambia
la conducta de las personas (o puede cambiarse)
LÍMITES DE LA PSICOLOGÍA DE LA
PERSONALIDAD CON RESPECTO A OTRAS DISCIPLINAS
La crisis de la
Psicología de la Personalidad está relacionada con la poca
claridad existente en muchos trabajos sobre personalidad, por
ejemplo: distinguir entre Psicología de la Personalidad y Social
es problemático porque algunos conceptos debían estar en
Psicología de la Personalidad (en la revista “Journal of
Personality and Social Psychology” ¿?) con los procesos de
atribución ocurrió lo mismo.
Otro aspecto que supuso una
disputa fue por la Psicología Clínica, la Psicología de la
Personalidad se ha identificado mucho con los métodos y
problemas de la Psicología Clínica sin preocuparse por delimitar
las áreas de investigación y la metodología propia. Actualmente
la delimitación está más clara porque el objetivo de la
Psicología de la Personalidad aparece centrado en el estudio de
la conducta normal mientras que la Psicología Clínica presta su
atención a la conducta anormal (Psicología Patológica).
En este momento histórico los
mayores problemas están con la Psicología General y
Diferencial:
·
Psicología General:
la P.G. por excelencia trabaja en tomar una dimensión abstracta
y aislada de la secuencia total que configura el fenómeno de la
conducta y en ese sentido le interesa demostrar la generalidad y
comunalidad de las funciones de estudio.
·
Psicología Diferencial:
surge para dar respuesta a la existencia de las diferencias
individuales y tiene por objetivo principal la investigación
cuantitativa de las diferencias individuales en la conducta.
La P.P. se relaciona con esta P.D.
en la medida en que también ella presta su atención a las
diferencias individuales pero se preocupa, no por cuantificación
de las diferencias, sino por la explicación de la naturaleza,
origen y los efectos de esas diferencias sobre el comportamiento.
Difícilmente se puede hacer P.P.
sin el concurso de la P.G. ya que ésta (P.G.) es la que presenta
las bases generales de funcionamiento del ser humano viniendo la
P.P a acotar el objetivo de aquella, intentando analizar el
estado y el cumplimiento de las funciones en cada individuo,
cuál es su organización, cómo y por qué se ha desarrollado y
cómo puede cambiarse.
Se constata que hay polémica
entre P.G. y P.P. ; esa polémica parece desde la consideración
de que P.P. es una rama, como desde la consideración que la P.G.
se debe subordinar a la P.P.
Los defensores de que es una rama
argumentan de la siguiente manera: “no hay leyes de personalidad
que funcionen al margen de las leyes de la P.G.”; la
diferenciación vendría dada por la restricción del objeto de
estudio que quedaría limitada al individuo.
Los defensores de la
subordinación de la P.General a la P.P. sostienen que no hay
leyes psicológicas generales que no tengan en cuenta los
procesos de personalidad.
El mantenimiento de la
polémica es un tanto artificial pero hay que constatar que sigue
desarrollándose en nuestros días, apareciendo acusaciones mutuas
entre los llamados personalistas y generalistas.
La polémica procede de que ninguno de los dos se queda dentro de
su campo.
Hay que dejar a la P.G. que sea
la que establezca las bases generales de toda la Psicología, así
como hay que dejar como propio de la P.P. el estudiar cómo las
funciones del ser humano intervienen en la determinación de la
conducta individual.
MODELOS TEÓRICOS
Toda teoría científica es una
construcción de la realidad que se genera para introducir orden
y dar sentido a dicha realidad. De esa teoría científica se
pueden derivar a su vez predicciones acerca de fenómenos aún no
observados o no explicados; toda teoría debe se susceptible de
refutación: principio de falsación (Poprer). Al
mismo tiempo toda teoría debe tener capacidad para generar ideas
que puedan llevar a nuevas proposiciones contrastables sobre los
fenómenos estudiados, por tanto toda teoría debe ser útil y
valiosa para la investigación en la medida en que permite
generar nuevas hipótesis que reciben contrastación empírica.
El lenguaje de una teoría
científica debe ser objetivo, que sus términos sean precisos y
debe ser amplia suficientemente (abarcativa) para englobar y dar
explicación de una gran cantidad de fenómenos y datos diversos,
y debe ser simple y coherente en los conceptos que emplea para
explicar esos fenómenos.
*Sobre las teorías de la
personalidad hay que decir que no existe una única
teoría general que pueda dar cuenta de todos los datos y
fenómenos. Hay un conjunto relativamente amplio y diverso de
teorías de personalidad, cada una de ellas.
Una de las notas más
diferenciadoras de la P.P. es la característica de ser
teorías generales de la conducta humana, ya que en principio la
teoría de la personalidad tendría como foco de conveniencia la
totalidad de la conducta. Esa enorme pretensión explicativa sólo
se logra a costa de reducir la capacidad de las teorías para
generar hipótesis específicas y contrastables sobre gran parte
de los fenómenos que supuestamente abarcan la teoría.
Lo cierto es que la mayoría de
las teorías de la personalidad son capaces de dar cuenta
solamente de un espacio limitado de fenómenos, incapaces de
predecir otros fenómenos e incluso parecen ignorar algunos de
los fenómenos de su campo.
Hay diversidad y fragmentación
teórica que es una característica de la P.P. cuya situación se
reduce en 3 puntos:
·
no existe un esquema conceptual comúnmente aceptado por los
investigadores de este campo
·
lo que existe más bien, es una gama bastante amplia de teorías,
con un pretendido poder muy abarcativo para con una limitada
capacidad para generar hipótesis contrastables
·
existe en los últimos 25 años un incremento en el desarrollo de
planteamientos teóricos dirigidos al tratamiento de aspectos
concretos de la conducta.
Esa situación nos permite
entender la complejidad y la dispersión de los repertorios
temáticos y bibliográficos en P.P., también resulta comprensible
la dificultad que entraña cualquier intento de análisis
globalizado de la P.P. Por lo cual es acertado hablar en P.P. d
una estructura multiparadigmática, tanto que no se debe
prescindir de los diferentes modelos teóricos que han sido
propuestos en este campo y que corresponden a los 4 modelos ya
señalados por Pinillos (1984):
- modelo psicodinámico
- modelo conductista
- modelo humanista
- modelo dimensional
- modelo cognitivo (añadido)
- modelo biológico (añadido)
METODOLOGÍA
En P.P. el avance
metodológico ha ido por encima del avance conceptual, lo que
tiene el peligro de instrumentalizar el estudio de la
personalidad, es decir, convertir el estudio de la personalidad
al servicio del método.
Los datos se deben ajustar a la
teoría y no ésta a aquéllos, es decir, la metodología ha de
ponerse al servicio de la teoría ¿?, es la herramienta de la que
disponemos para la teoría, la metodología es un apoyo y se debe
ajustar al objeto y no al revés.
Los principales métodos de
investigación en P.P. remiten a las 3 tradiciones de
investigación que se han dado en este campo, y como ha señalado
Pervin (1996) son:
·
clínico:
tiene que ver con el modelo psicodinámico y humanista y
fenomenológico
·
experimental:
tiene que ver con el modelo social-cognitivo y conductual
·
correlacional:
tiene que ver con el modelo dimensional
La aproximación clínica
parte del supuesto de la importancia de la subjetividad del
individuo y por tanto la información cualitativa es de especial
importancia, además centrar todos los esfuerzos en un único
sujeto permite la profundización en él; ahora bien, con
independencia de estas consideraciones, sin embargo esa
aproximación dificulta la obtención de conocimiento científico,
en la medida en que resulta imposible replicar los resultados
obtenidos.
La aproximación experimental
trata de superar el problema anterior. Es replicable el
resultado. Sostienen que esta tradición es la única que permite
obtener conocimiento científico, pero pierde de vista al
individuo porque pone el énfasis sobre las variables y no
atiende a los individuos, de tal modo, que si los experimentos
están bien realizados y se mantienen las condiciones
experimentales, los resultado están bien realizados y se
mantienen las condiciones experimentales, los resultados van a
ser los mismo con independencia de las personas que participen
en ellos. Deberán cumplir requisitos de comparación de una serie
de variables que les equipare (por ejemplo: edad, sexo, etc.).
La utilización de los
experimentos indica una concepción transversal (se opone
a una consideración longitudinal). El estudio de una variable o
de pocas, representa una solución que ha dado sus frutos; la
cuestión radica en la selección de esas variables, control de
las que pueden dañar el experimento y selección de los
individuos a los que pasar el experimento. Por esos problemas
algunos investigadores han considerado que el método más
apropiado es el correlacional porque presenta la gran
ventaja de manejar muchas variables, lo que resuelve el viejo
problema de abarcar la complejidad del ser humano.
Abarcar tantas variables indica
una escasa profundización, por ello, ciertas soluciones como la
del modelo de las 5 dimensiones/factores, en lugar de rasgos,
modelo de los Bigfive: apertura a la experiencia, minuciosidad,
extraversión, amabilidad y neuroticismo.
Problema:
si ha proporcionado extensión de conocimiento pero no ha
supuesto una integración teórica, lo que le ha convertido en un
saber enciclopédico.
Los psicólogos del personalidad
han empleado demasiado tiempo en discutir cuál de los 3
procedimientos era el más adecuado para estudiar la personalidad.
Desde 1957, cuando se escribió un artículo cuyo autor fue
Cronbach, el primero en cuestionar el conductismo (primero en
dar el paso de la Psicología Cognitiva) desde entonces se han
buscado fuentes de enlace en los diferentes métodos.
Se puede señalar que quizá la
mejor forma de compatibilizar los 3 métodos es situarlos en una
secuencia: clínico, correlacional y experimental.
Las observaciones de las personas
dan pistas sobre las dimensiones que, identificadas
factorialmente, son puestas a prueba experimentalmente para
llegar a su ¿modo?.
RESUMEN LECTURA OBLIGATORIA:
“ Ámbito de la personalidad en
Psicología”
Artículo dividido en 5 apartados:
1º) Se pone de relieve que las
ciencias tratan conceptos y no con realidades (constructos o
construcciones mentales) pero el carácter construido de éstos no
significa que las ciencias que no traten sobre hechos o
realidades del mundo humano, por consiguiente, decir que
personalidad es un constructo no significa que la personalidad
no sea algo real.
Una teoría científica es un
sistema coherente de conceptos e hipótesis que tratan de
representar y de explicar una determinante parcela de la
realidad ¿cuál es la parcela de realidad de la P.P.? Los
conceptos y realidad de la personalidad son comportamentales, es
decir, se ocupan de observables y no de esencias.
El autor precisa que no deben ser
observables de modo inmediato/directos. La acotación de esos
observables es lo que nos presenta en el apartado 2.
2º) En la P.P. hay algo más que
idiosincrasia: todo ser humano presenta algo de
único/singular y por tanto se opone a nomotético:
establecimiento de leyes. Hay también relaciones y fenómenos
sociales que no suelen ser contemplados por la tradición
idiosincrática.
Las conductas aparecen
organizadas en estructuras y patrones, y aparecen organizadas en
simultaneidad/sincronía. Entre los patrones observables de
conducta un primer conjunto bien visible se agrupa en torno al
hecho diferencial, se trata de una de las características más
sobresalientes de la conducta humana, esto es, su diversidad a
través de los grupos y los individuos. El comportamiento humano
aparece sorprendentemente variable, sobretodo comparándolo con
la gran uniformidad del comportamiento animal. Ahora bien, la
diversidad no se produce al azar si no que se organiza en
patrones de conducta, estos constituyen un fenómeno complejo
que incluye al menos 2 elementos: el hecho diferencial en
circunstancias idénticas o parecidas, es decir, los seres
humanos se comportan de manera diferente no cualitativamente
sino diferente de grado, se muestran (esas diferencias) sujetas
a regularidades y también están asociadas a otros hechos y
procesos por ejemplo: de aprendizaje, de comportamiento social…
que presentan relaciones significativas entre sí.
Desde finales de los años 60 se
han suscitado 2 cuestiones importantes:
a)
si esas diferencias
y pautas diferenciales pueden ser medidas fiablemente
b)
si esas variables y
pautas diferenciales constituyen una explicación de la conducta
El 2º elemento es la relativa
constancia/estabilidad en el modo de comportarse cada p
persona que parece tender a cierta semejanza de comportamiento,
incluso cuando la situación es diferente; a este propósito, un
nuevo gran debate es que los investigadores han intentado
distinguir entre la estabilidad que se refiere a la persistencia
de las conductas a través del tiempo, lo han distinguido de la
persistencia a través de la situación (que no es lo mismo que a
través del tiempo).
Durante mucho tiempo la
Psicología Científica no puso en tela de juicio el dato de una
cierta estabilidad comportamental, más aún hizo de ella la base
de teorías que entendieron la personalidad como el patrón
conjuntado de rasgos.
A principios de siglo se ha
cuestionado el carácter estable de la conducta personal.
En el último tercio de siglo se
ha puesto en duda la idea de estabilidad.
Frente al postulado clásico de
que había una consistencia personal, los autores de orientación
conductista sostuvieron la idea de la especificidad situacional
de la conducta humana, es decir, esta conducta estaría regida no
por las imposiciones intrapsíquicas permanentes (rasgos) sino
por condiciones de estímulo cambiante.
Se ha argumentado que la
estabilidad a través del tiempo podría ser debida a la
permanencia de las situaciones. Se ha ido planteando si hay algo
más que estabilidad a lo largo del tiempo, es decir, si hay
además consistencia transituacional o por el contrario,
si cuando la conducta permanece idéntica es porque la situación
ha permanecido siendo la misma.
Hay que señalar el hecho de que
las diferencias interindividuales, son relativamente estables,
sea cual sea la explicación que se de a ese hecho.
3º) El agente de la conducta,
el autor se cuestiona qué procesos se deben postular entre el
estímulo y la respuesta. Recoge la observación de Pinillos
(1978) indica que la personalidad es la estructura necesaria
para la razón del modo individualizado en los sujetos responden
a los estímulos del medio. Tanto el concepto d personalidad como
otros constructos psicológicos (rasgos, yo, etc.) han surgido
para describir, analizar y tratar de dar cuenta del hecho de que
los seres humanos responden de modo diferenciado y singular a
las situaciones a las que se encuentran.
No se trata de un mero postulado
sino también de un observable/realidad empírica en la que se
pone de manifiesto que la conducta es siempre de alguien.
4º) Presente lo referente a la
persona en acción. La conducta es siempre de alguien. Los
seres vivos se caracterizan no sólo por reaccionar ante los
estímulos procedentes del exterior sino que también se
caracteriza por poseer energías propias y estar activado por
ello.
Mucho más que en otros seres
vivos, en el ser humano hay que dar cuenta de la variada
actividad espontánea que desarrolla desde la infancia con
carácter exploratorio/de curiosidad, entonces nos da cuenta de
que no es un sujeto meramente pasivo o reactivo, sino que
también es un principio de actividad con energía propia
(agente).
Junto con eso está su carácter
adaptativo, la adaptación es una función generalizada, un
atributo de conducta por el que la persona trata de sobrevivir y
vivir mejor.
Ha permitido que se vaya
centrando el estudio, no sólo en la conducta el estímulo, sino
también en cómo funciona el sujeto.
El interés funcionalista
dominante en Psicología está en contra de la estructura, ese
interés ha acabado por preguntarse por el sujeto, es decir, la
idea misma de función adaptativa alude a que algo o alguien se
adapta/funciona de un modo determinante y en ese sentido
aparecen conceptos de personalidad, en ese sentido hay que
puntualizar que es un mismo y solo individuo el que realiza
actividades tan variadas como percibir, aprender, recordar,
formar conceptos, etc.
Es la unidad integrada por
elementos que pueden ser analizadas y estudiados, est aP.P. está
llamada a desempeñar un cierto papel integrador y unificado.
Hay que hablar de tipos
concretos de conducta: a) conductas de afrontamiento
de una realidad que amenaza a la personalidad; b) las conductas
autoreferidas y c) las conductas que se refieren a la
relación interindividual:
a)
Ctas. de
afrontamiento: en un sentido amplio del término toda conducta
sería una conducta de afrontamiento del medio y de
autoprotección del sujeto. Algunas conductas se distinguen por
servir muy específicamente a funciones de protección del sujeto
frente a una estimulación nociva/dañina, frente a peligros o
amenazas del medio exterior y del mundo interno. Entre ellas
están la ansiedad, la depresión, la agresión … El afrontamiento
constituye una conducta que responde a una situación y una tarea
paradójica, como es la de defenderse y manejarse cuando no se
dispone de recursos para ello.
b)
Ctas. Autoreferidas:
en ellas un mismo individuo es a la vez el agente y el término
de su acción (mirarse la palma de la mano). No delimitan el
autoconcepto (concepto cognitivo internos) sino también tienen
que ver con el autocastigo, la autodefensa, etc (elementos
emocionales).
c)
Ctas. Relación
interindividual: toda conducta es social e interpersonal,
algunas conductas consisten en la comunicación y la relación con
otras personas con lo cual se entra en la vertiente social de la
personalidad, en que éste es una realidad social y no meramente
individual. A partir de esa premisa los psicólogos sociales se
han interesado por procesos de conducta manifiesta como la
interacción personal y procesos de naturaleza cognitiva (percepción
de personas) y desde esa línea se insiste en que la personalidad
no sería un atributo del sujeto (desde la Psicología Social)
sino un mero efecto de la percepción que los demás tienen de
nosotros.
En la actualidad asistimos a una
convergencia de la Psicología Social y de la Psicología de la
Personalidad, la irrupción de lo psicosocial en el ámbito de la
personalidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario