Te has sentido cansado, fastidiado, aburrido, estresado, enojado en
tu trabajo u oficina, si es así te comparto esta seríe de consejos que
publicaron en Pulso Digital y sé te ayudarán a conservar un estado de ánimo adecuado para que realices tus tareas de oficina diariamente.
EQUILIBRA LA MONEDA
Toma todas las monedas de tus bolsillos, e intenta pararlas de canto
sobre la superficie del escritorio. Esto requiere de concentración y
maña, pero también de respirar profundamente al intentarlo, lo que te
ayuda a oxigenarte y tranquilizarte aún más.
HAZ CONTACTO CON EL SUELO
Cuando te sientas presionado, quítate los zapatos y haz un intento
consciente por colocar toda la planta de ambos pies en la alfombra. El
estiramiento requerido para lograr esta labor relaja notablemente. Una
variante: rueda algún objeto redondo (una botella de plástico, algún
cilindro de metal) con los pies descalzos. Al parecer la presión en la
planta del pie alivia la tensión nerviosa.
SÓLO CON TU PAREJA
A la hora que estés más estresado, llama por teléfono a tu pareja y háblale de cosas eróticas… ¿Es necesario decir más?
DESPEJA TU ESCRITORIO
¿Sabes cuál es un detonador de estrés adicional que no necesitas
añadir a tu vida? El desorden de tu escritorio. No puedes concentrarte
en los problemas externos si tienes una piedrita en el zapato que te
está afectando constantemente. No tienes que arreglarlo todo de una sola
vez, pero reserva espacios de cinco a diez minutos para clasificar y
despapelar, y al término del día tendrás un escritorio digno de un
empleado eficiente, en vez de ese puesto de mercado folclórico sobre el
que pretendes “trabajar”.
NO SEAS ESCLAVO DEL E-MAIL
Algunas personas saltan como perros entrenados cada vez que el
notificador de correo electrónico se enciende en la pantalla de la
computadora. Desactiva esas alertas constantes y reserva dos o tres
veces al día para revisar tu correo. Verás que eliminas una preocupación
innecesaria y puedes atender mejor los pendientes auténticos en menos
tiempo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario